Objetivo: ganarlo todo

Objetivo: ganarlo todo

Salta al campo la máquina perfecta. Casi perfecta. Primer día de curso, primer día para empezar a ganar la Novena, la Liga, la Copa y todo aquél partido donde haya un título en juego. El Real Madrid está diseñado así para arrasar en 2002, coincidiendo con el Centenario. Las expectativas son máximas en torno a las posibilidades de este supraequipo reforzado por Zidane, el jugador con mejor concepción del fútbol en Europa. No hay más objetivo que el gran objetivo: ganarlo todo.

Vicente del Bosque manejará una plantilla nuclear y no le debe temblar el pulso. Ha dicho en AS que ni siquiera Zidane le cambiará la pizarra. Y también que no habrá privilegios a la hora de esbozar una alineación. Son máximas fundamentales de trabajo, porque a este superlujo de plantilla hay que exigirle un principio histórico del Madrid: la humildad y la generosidad en el campo.

El entrenador blanco ya ha demostrado estar a la altura de las circunstancias la pasada temporada y hoy ya no es un tipo sospechoso en el banquillo. El madridismo clásico y arraigado se ha visto reflejado en este técnico discreto, defensor de los valores tradicionales. Desde su perspectiva nunca habrá estridencias muy a la moda en otro tiempo. Hay consenso, por lo tanto, en referencia al hombre que va a tener en sus manos al equipo mejor valorado del planeta. Florentino Pérez abre un segundo proyecto esperanzador y ha contagiado a los aficionados la sensación de que el Madrid va bien. Septiembre será tiempo del diagnóstico.