Gracias por devolvernos la ilusión

Gracias por devolvernos la ilusión

Alejandro, mil gracias por devolvernos la ilusión a todos los que amamos este precioso deporte. Tu victoria en la línea de meta de Courchevel ha sido realmente grande, pero la sonrisa que has logrado dibujar en la cara de millones de aficionados españoles al ciclismo no tenemos con qué pagártela. Desde la época de Delgado e Induráin no había visto la redacción de deportes de la Ser saltando y animando como lo hacían ayer en cada pedalada en la que esprintabas el triunfo a Armstrong.

Sabes que somos egoístas y que ya queremos que ganes el Tour, pero también sabemos que estás en buenas manos. Primero, Echávarri y Unzué forjaron a Arroyo, a Perico y luego a Miguel. Ahora te están moldeando con sumo cuidado a ti para lanzarte al estrellato. Escucha sus sabios consejos, porque con la calidad que atesoras estás llamado a ser un grande de este deporte. No quiero olvidarme, por supuesto, de Mancebo, que ayer dio en los Alpes el salto de calidad que todos esperábamos de él. Hasta su recién nacida, Paula, daba saltos de alegría en la cuna viendo cómo su padre le disputaba la etapa a Lance Armstrong. San Fermín ha vuelto a sonreír. Primero lo hizo con Reynolds, luego con Banesto y ahora lo hace con Islas Baleares. Estoy completamente seguro de que el pañuelo rojo pronto querrá que se transforme en amarillo.