Estamos en el pelotón de cabeza y nos faltan los sprinters

Estamos en el pelotón de cabeza y nos faltan los sprinters

Caminábamos bajo la lluvia hacia el Calderón cuando mi hijo Borja me hizo la reflexión de que podría ser el primer Mundial de su vida sin la presencia española en la fase final. Yo he vivido cuatro en esas circunstancias y además hubo otras dos con anterioridad a las que tampoco acudimos. Nuestra Selección ha llegado hasta donde le han dejado, que nunca ha sido mucho, y a pesar de ello está clasificada entre las primeras y como líder de las que nunca conquistaron la Copa del Mundo. Ese es el valor real de nuestro fútbol. Podemos lamentar no haber ido a Uruguay cuando estábamos considerados el mejor equipo europeo; la derrota ante Italia cuando era imposible ganarle en Florencia; la ausencia de un grupo extraordinario de futbolistas en Francia por estar inmersos en nuestra Guerra Civil. Bueno, con un grupo magnífico nos vimos fuera de Suecia y fracasamos en Chile. Nuestro problema es que comparamos con los éxitos de nuestros clubes, pero cuando no tuvieron extranjeros (1964-73) apenas los conseguimos. El fútbol español siempre está en el pelotón de cabeza pero nos falta el sprinter que nos dé el triunfo final. Viví con enorme ilusión el torneo de Brasil 50 y la victoria sobre Inglaterra. Ese cuarto puesto nunca lo hemos superado y pudimos ganar a Uruguay que a la postre fue campeón.