Hay que entrar en el siglo XXI

Hay que entrar en el siglo XXI

Uno aspira a cambiar el dígito de las decenas y seguir custodiando la caja; el otro en remover conceptos y avanzar. Anodina continuidad contra el derecho a equivocarse por intentar progresar. Lennart Johansson o Michel Platini. Hoy las 52 Federaciones de fútbol europeas deciden si el casi octogenario mandatario sueco obtendrá el plácet para gobernar el fútbol europeo durante veinte años -lleva 16-, o bien un recién cincuentañero francés que lo fue todo como jugador, tiene la oportunidad de demostrar que su bien amueblada cabeza en el manejo del balón, también lo está para adentrar la dirección el fútbol continental en el siglo XXI. Johansson ha durado a base de nadar de "muertito"; sin chapotear, suave, dejándose llevar pero sin soltar un euro ni escuchar a nadie más que a su aparato de acólitos. Ahora promete 340.000 euros a cada federación para "ayudar el fútbol base". Comprando voy.

Platini ofrece diálogo, más voz a las ligas y a los clubes -sin distinciones- y atención al fútbol de los estados con menos recursos. Priorizar el fútbol frente la voracidad de los bussines. Las últimas informaciones apuntan una ligera ventaja a favor del aspirante francés. Poco más de media docena de federaciones están indecisas. Todas ellas consideradas de perfil "pobre". Darles pescado o enseñarles a capturarlo. Un dato para calibrar lo que hoy se juega en el Congreso de la UEFA en Dusseldorf: Ángel María Villar ha prometido su voto a Johansson.