Ferguson sabe cuál es la estrategia blanca pero culpa al mensajero

Ferguson sabe cuál es la estrategia blanca pero culpa al mensajero

Un famoso entrenador que ha decidido abandonar su club y que podría entrar en las quinielas si el Madrid decidiera desprenderse de Capello lo puso ayer así de complicado: "Es más fácil que yo me vaya al Madrid que Cristiano Ronaldo fiche por los blancos". Nadie dijo que iba a ser fácil. Ni siquiera se augura un éxito final en la empresa por mucho que se diga, con razón, que el futbolista vendría de buena gana a nuestra Liga. Pero lo que sí está siendo es previsible: las portadas, que parten de algún mensaje del club, acompañan a la búsqueda de información y de palabras del implicado, al mismo tiempo que el Manchester reacciona con dureza e ira. Ahora falta que Ronaldo se moje y que el club inglés negocie. Casi nada.

Nuestro Ribot se metió en la boca del lobo con esa valentía a la que nos tiene acostumbrados. No sé si sabía o no lo que le iba a caer encima, pero hay varios compañeros de profesión que podrían haberle advertido. Ferguson no se habla con la BBC. En una ocasión llamó homosexual a un periodista. Vetó a un conocido reportero de Sky por bromear en un legendario reportaje sobre unas bragas que encontró en la taquilla de Beckham. Así que cuando al escocés le contaron que en España se había iniciado la campaña para que Cristiano acabe en el Madrid, no dio opción a la diplomacia. Como si la culpa fuera del mensajero. Igual desde el Bernabéu se debería montar una estrategia diferente (¿se imaginan al United intentando llevarse al mejor Zidane del modo como ficha el Madrid?). En Inglaterra se sabe perfectamente cómo se mueve el club blanco en materia de traspasos y el antídoto es ya automático: una cucharada de fergusonina.