No votar es escurrir el bulto

No votar es escurrir el bulto

El desencanto en que está sumido el Athletic tras su última referencia institucional y deportiva dibuja un escenario peligroso para la jornada electoral de hoy, la más trascendente en décadas. Aún ayer, las encuestas arrojaban que un tercio de los votantes no sabe en quién de los candidatos confiar la emblemática nave. García Macua, favorito en ellas, representa la pujanza e intenta convencer al socio con una promesa de futbolistas que dan para llenar un vestuario. Ercoreca, sabedor de los errores cometidos, ha tratado de ganar adeptos con una fórmula más tradicional, apoyada en valores y ex leones emblemáticos. Javier González, conocedor de que partía con desventaja, ha buscado en todas las esquinas del panorama futbolístico un proyecto ilusionante para Lezama.

Todos ficharán mucho, todos se creen con el mejor proyecto, todos modificarán la estructura deportiva, todos anuncian un cierre de filas y apoyo al ganador... Se necesita. La peor noticia de esta noche sería la proclamación de un presidente refrendado por un sexto de la masa social. Hay que mojarse, votar. Dentro de tres días, empezará a trabajar el equipo y para entonces el Athletic debe estar muy limpio de cabeza.