Bien hecho, Fernando

Bien hecho, Fernando

Llegó a su box por un sitio contrario al habitual. Se fue por el pit lane y encaró hacia la zona de los ingenieros. Estaba furioso y golpeó su casco contra una pared. Alonso dijo basta. El español se descargó de muchas cosas que llevaba dentro al bajarse de un coche que incomprensiblemente no funcionó en el momento justo. Y apuntó hacia su equipo y, con más precisión, hacia Ron Dennis.

Que nadie se escandalice por lo que dijo Alonso. Dijo lo que tenía que decir. Es más, no ha dicho todo lo que hubiese querido, porque de haber sido así, creo que ni siquiera hubiese estado en condiciones de correr hoy. La F-1 va hacia un sitio que no es a favor de Alonso. Pero los verdaderos capitanes nunca se han dejado moldear por los que mandan en los despachos. Bien hecho, entonces, Fernando.