Una plantilla hecha con previsión

Una plantilla hecha con previsión

Después de la tremenda mala fortuna que está teniendo el Betis con los lesionados en ataque, no le queda otra al equipo y al club que seguir adelante y afrontar gran parte de la temporada con el mayor optimismo posible. Han caído ya Odonkor, Xisco, Mark González y Edu, teniendo en cuenta además que Sergio García tampoco estará disponible este domingo en Soria por su sanción. Esto en números se traduce en que el Betis no contará con sus dos goleadores de la pasada campaña junto a Pavone, como son el brasileño y el chileno, dos bajas sensibles de las que se resentiría cualquier equipo. Pero aquí entra la labor de previsión realizada por la dirección deportiva y el cuerpo técnico en el pasado mercado de verano e incluso en años anteriores.

La agradable irrupción de Damiá responde a las expectativas generadas en el club desde el mismo momento en el que se le contrató. A pesar del largo espacio de tiempo que estuvo inactivo (muy pocos son capaces de regresar al fútbol y ofrecer el rendimiento actual), el Betis siempre confió en Damiá como un futbolista válido, y aquí reside una de las grandes virtudes de este club: confía ciegamente en sus técnicos y en sus jugadores. Al igual que a Lopera siempre le costó un mundo cesar a un entrenador, igualmente le cuesta deshacerse de los futbolistas, a los que prácticamente apadrina. Damiá, Pavone, Juanma, Mehmet, Emana... aciertos y más aciertos de una dirección deportiva a la que ya se le deben empezar a reconocer sus méritos.