Ambos marcaron el camino

Ambos marcaron el camino

Aunque Víctor Espárrago escribió una de las páginas más importantes de la historia del Cádiz al lograr dejar al equipo amarillo en la decimosegunda posición en la 87-88, en Primera, en la época del añorado Manuel Irigoyen. En los últimos años, con Antonio Muñoz como máximo mandatario y tras nueve temporadas de penurias en Segunda B, apareció un gaditano de pura cepa para conseguir el anhelado ascenso a Segunda, sacando al equipo de ese pozo, devolviendo la ilusión a una alicaída afición, que comenzó a poblar las gradas del vetusto Ramón de Carranza. Con la posibilidad de seguir creciendo como técnico, José toma las riendas del Albacete en la máxima categoría del fútbol español y dejó el testigo a Espárrago, que a pesar de estar curtido en mas de mil batallas y poseer un envidiable palmarés, comienza a trabajar con humildad y mucha sapiencia.

El uruguayo conservó lo bueno que tenía el equipo de José, al que le sumó sus valores particulares. Así se logró realizar una temporada de ensueño, consiguiendo el ascenso a Primera, siendo el equipo más realizador, el menos batido y dejando un sabor de boca exquisito en todos los cadistas. Dos nombres importantes en la reciente historia amarilla, dos hombres que han marcado el camino. Javi Gracia está marcando esta temporada un camino similar al de sus antecesores, con muchos de los argumentos que permitieron lograr el éxito deseado: humildad, orden, disciplina y, sobre todo, un trabajo muy bien hecho.