La Vanguardia publicó el domingo que ciertos jugadores del Espanyol habían abandonado el Sutton, afamado local nocturno barcelonés, bien entrada la madrugada del viernes. Cuatro horas antes de estar citados para entrenar. El título de la información, Barra libre perica, era del todo sugerente. Ninguno de los trasnochadores pertenece al eje del mal, ese grupo al que desde ciertos sectores se pretende hacer responsable de todos los males pericos, desde la venta de La Chatarra a nuestros días. Me refiero, naturalmente, a Tamudo, Luis García y De la Peña. Curiosa la noche barcelonesa. Los culés son más asiduos de Ribelino's (dirigentes inclusive) y Bikini. Pero sobre eso se publica poco. Más bien nada.

Personalmente me preocupa más lo que hagan los muchachos los domingos por la tarde aunque tampoco es para aplaudir ciertas exhibiciones y más como está el patio. Y el patio indica que la pelea por la supervivencia se prolongará hasta mayo junto a Mallorca (vendrá a Montjuïc), Osasuna, Sporting y Numancia (los visitará el Espanyol) y alguno que se empantanará, tipo Recre. Muchachos: déjense de cosas raras.