Lendoiro aprieta, cede y se ahoga

Lendoiro aprieta, cede y se ahoga

Las mundialmente famosas cenas de Lendoiro con los representantes empiezan últimamente de las misma manera. El presidente toma la palabra para poner de relieve la enorme crisis que azota al fútbol, lo malitas que están las cosas y su imposibilidad de dar medio euro más de lo que ya ofrece. A la vez, aprieta a muchos de los agentes diciéndoles que le traigan una oferta en firme de otro club para estudiarla y compararla. En la primera fase de contactos para muchas renovaciones la religión es el uno más uno, o sea, una temporada más otra por objetivos. Así lo ha hecho con Lotina, Sergio y Manuel Pablo. Pasado un cierto tiempo, o mil y una cenas, el de Corcubión muestra la cara amable de un negociador con tablas y da su brazo a torcer: 'Vale, estoy de acuerdo con lo de las dos temporadas, pero lo económico no puedo subirlo ni un euro'.

Ahora la pregunta es si Lendoiro va de farol o realmente sus ofertas están al límite de sus posibilidades. Por desgracia, parece que no es un órdago y que las arcas no es que estén vacías, es que no tienen fondo. En cuatro de las principales renovaciones (Verdú, Lotina, Sergio y Manuel Pablo) hay acuerdo en la duración, pero no en las cifras. La otra que interesa, De Guzman, no se aborda porque el jugador ha denunciado al club. La liquidez del Deportivo está bajo mínimos, pero lo peor es que las provisiones económicas no pintan mejor. Con tanta crisis, quizás es el momento de que Lendoiro dé ejemplo y se ajuste el sueldo a los tiempos que corren... o no.