Etoo como moneda, Ibrahimovic y Villa

Etoo como moneda, Ibrahimovic y Villa

Etoo está que fuma en pipa. La operación que el Barça pretende montar con el Inter se diseñó sin previa consulta con él. Y su ego ha sufrido. El Barça le propone como papel moneda, como parte del pago por un jugador al que seguro que él no se considera inferior. Etoo, más 45 millones más un año de 'alquiler' de Hleb. Para un jugador que se considera aspirante al Balón de Oro cada año, que se siente asimismo embajador de su país, Camerún, en el mundo, es un desdoro excesivo. Por eso, y aunque el Inter es para él un destino tan bueno como el mejor de los posibles, lo va a poner difícil.

Su idea es pedir quince millones a tocateja, más diez netos por cada año de contrato. De esa forma, de los 45 que paga el Barça sólo 30 llegarían al Inter, los otros se los quedaría él. Si no le dan el gusto, es perfectamente capaz de quedarse en el Barça, a lo que tiene todo el derecho del mundo. Así que la operación va a estar, me figuro, algún tiempo en el alero, aunque espero que cuaje. Y lo deseo: Etoo y el Barça ya no tienen un camino juntos por delante y ambas partes lo saben.

Ibrahimovic sería una brillante novedad para nuestro fútbol, que con él reuniría ya a casi todos los mejores jugadores del mundo. Pero me queda margen para preguntarme una cosa. ¿Y si de verdad el Barça quería a Villa, por qué no hizo una oferta así? Como le pasa a Florentino, a Laporta le deslumbran más los extranjeros que los nacionales. Porque ésta sí que es una oferta escandalosamente escandalosa. Y Villa no tiene el brillo de Ibrahimovic, ni es la apuesta de futuro que se supone es Benzema, pero es un delantero formidable, seguro, que garantiza el gol por la vía más simple, rápido, adaptable... Sabe mal que ninguno de nuestros dos grandes clubes haya sabido reconocerle en lo que vale.