El partido acabó muy a lo Atleti: regalito de la defensa a Arshavin y derrota. Pero hubo cosas positivas. La primera: Asenjo. Un porterazo. El Atlético tenía el puesto bien cubierto con Leo Franco, pero Asenjo es una apuesta de futuro, para muchos años. Tiene unas posibilidades inmensas. Ante el Arsenal sacó tres o cuatro manos espectaculares y juega muy pendiente de la defensa adelantada que tanto le gusta a Abel. Es un portero moderno, que se convertirá en indiscutible. Un acierto.

Entre lo positivo: Jurado. Entró muy al final con Cléber. Y con ellos dos más Pacheco, otro acierto, Maxi y Borja, el Atlético tocó mejor, controló el juego en el mediocampo, algo a lo que no estamos acostumbrados. Jurado, además, firmó un pase maravilloso que valió el gol de Pacheco. Por ahí puede encontrar Abel lo que busca en el centro del campo. Con Raúl García y Assunçao tenemos más de lo mismo: mucho corte, mucha fuerza y poco toque. Y el Atleti necesita en el centro del campo futbolistas con imaginación, criterio y fútbol. Abel tendrá que mezclarlo todo para que esto funcione. Por ahora sólo lo hace a ratos. Como la pasada temporada.