Pedro Rodríguez, el de Abades

Pedro Rodríguez, el de Abades

Un día Manu Oliveros dirá en la SER: Pedro Rodríguez, el de Abades. Cuando empezó a decir "Andrés Iniesta, el de Fuentealbilla", la gente empezó a fijarse en uno de los mejores del Barça. Pedro le sustituyó ayer, y ha empezado a entrar en la misma leyenda: la de los futbolistas tranquilos, que aspiran tan sólo a ejercer su arte sin otra ambición que la de ser útiles. Y no sólo es útil ahora Pedrito: es decisivo. Lo fue en la anterior Copa de Europa y anoche demostró que en ésta lo puede ser también, y aún más.

Para que Pedrito sea Pedro Rodríguez, el de Abades, ha hecho falta un entrenador como Pep que lo saque a jugar con sus ídolos. Anoche, cuando acabó el partido, Pedrito deambulaba por allí como si hiciera el ritual del aficionado. Él aún no nota que es una estrella. Y no lo notan tampoco sus colegas, porque nadie le pidió la camiseta cuando terminó el partido. Y un día querrán tenerla. Laura Martínez dijo en la Cadena SER que sus compañeros le llaman PR17. Pronto dejará de ser una broma. En cuanto Manu le llame Pedro Rodríguez, el de Abades, Tenerife.