La Euroliga se merecería más

La Euroliga se merecería más

Ha arrancado la Euroliga, competición que en rango tendría que ser la segunda en nuestras preferencias, pues es la equivalente a la Champions. Ahí están los 24 mejores equipos de Europa, cuatro de ellos españoles. Madrid y Barcelona tienen la firme aspiración de jugar la Final Four; Baskonia y Unicaja miran a más corto plazo: superar la liguilla de clasificación (pasan cuatro equipos de cada grupo de seis), y después, en el más selecto top-16 (pasan dos de cuatro), ya se verá. Se trata, pues, de una competición larga: diez partidos en la primera liga, seis en el top-16, un playoff al mejor de cinco partidos en los cuartos de final y la Final Four del 7 al 9 de mayo. Mucha tralla. Son casi siete meses de competición, y hasta febrero pasarán pocas cosas.

Pocas cosas en cuanto a los equipos que parten con auténticas aspiraciones. Por supuesto que habrá quienes en un mes se estén jugando la continuidad, pero serán los comparsas, aquellos que no tienen ningún futuro, aunque el sistema de competición es tan generoso que el año pasado permitió pasar al Prokom con ¡dos victorias y ocho derrotas! Esto es lo que hace situarse a la Euroliga a la cola de las grandes competiciones internacionales. La audiencia media fue de 507.000 telespectadores el año pasado, y eso que Madrid y Barça coincidieron en el top-16. Pues hasta una etapa del Giro, con toda la crisis que arrastra el ciclismo, se vio más que los Madrid-Barça. Hoy, por cierto, hay partido con morbo, pero ¿qué se juegan con todo lo que queda?