Amorrortu o el trabajo bien hecho

Amorrortu o el trabajo bien hecho

Cuando, allá por mayo de 2006, Miguel Angel Gil Marín nombró en el mismo acto a Jesús García Pitarch y José María Amorrortu director deportivo y director de cantera, respectivamente, las críticas arreciaron porque ninguno de los dos nuevos técnicos contaban con pedigrí colchonero. Una vez superado ese escollo, harto complicado para los atléticos, y después de tres temporadas en sus cargos, ya hay perspectiva para analizar y juzgar el trabajo de Pitarch y Amorrortu.

Pitarch, que está amortizado y como mucho aguanta hasta final de temporada, recibe un suspenso por, entre múltiples motivos, con ruedas de prensa surrealistas y sumisas incluidas, no haber conseguido que alguno de sus fichajes se revalorice en el Atlético. Amorrortu saca un notable, tirando a sobresaliente, por desmontar la máxima de que el Atlético no puede competir con el Real Madrid por la abismal diferencia económica existente entre ambos clubes. Desde el Segunda B hasta el cadete, pasando por los juveniles (Suso no ve partidos de cantera), el Atlético compite y supera al Madrid, con menos pasta. ¿Y por qué no Amorrortu de director deportivo?