Qué puedo decir de Marta Domínguez que no se haya dicho antes? ¿Que es una campeona ejemplar? Pues lo rubrico. No sé si verdaderamente nos damos cuenta de la dimensión que tiene una atleta que ha ganado un oro en un Mundial. Eso no está al alcance de cualquiera. Para llegar hasta ahí hay que representar los valores que personaliza Marta: el esfuerzo, el trabajo, el sacrificio, la constancia, la clase... Lleva muchos años como atleta y nunca se ha dado por vencida. Ese es su gran valor. Si Marta se marca un objetivo y no lo consigue, no baja los brazos ni se rinde. Al contrario, ella busca otra oportunidad. En los Juegos de Pekín 2008 sufrió una caída que le privó de las medallas. Todavía no dominaba totalmente la prueba de 3.000 metros obstáculos. Siguió entrenándose, mejorando la técnica, y en Berlín cazó el oro que antes había rodado por los suelos. Conociendo a Marta, estoy seguro de que en Londres 2012 no se le puede escapar esa medalla olímpica que tanto anhela.

Yo me siento muy identificado con Marta Domínguez, hay cosas en ella que me recuerdan al Fermín Cacho de los mejores tiempos. Por ejemplo, ella se fija un objetivo al principio de la temporada y, aunque esté compitiendo todo el año, su punto álgido lo alcanza justo en la fecha que se ha marcado, en el día señalado. Es una de las claves de su éxito. Por un lado, sabe prepararse para llegar a tope a las grandes citas. Por otro, se crece en la alta competición y no se amilana ante nadie.

Luego está su condición de castellana, que algo influirá. Por alguna razón, Castilla-León siempre ha sido cuna de grandes deportistas, en general, y de atletas, en particular: Mariano Haro, Manolo Martínez, Abel Antón, yo mismo... La vida en familia, lejos del estrés, nos da la tranquilidad para poder prepararnos. Pero, por encima de todo, creo que Castilla (con todos los respetos al resto de españoles) da carácter. Ahí tenéis a Marta para confirmarlo.