Esta vez Cristiano no puso su plus

Esta vez Cristiano no puso su plus

Al Madrid se le escapó la posibilidad de un liderato que le hubiera resultado muy oportuno. Más allá de cómo pueda acabar esta Liga, que todos damos por seguro que estará entre el Madrid y el Barça, el madridista necesitaba un consuelo tras el tsunami de barcelonismo que ha sufrido estas navidades, con el sexto título del Barça, que completaba la colección, y el Balón de Oro de Messi. Premio individual, pero al fin y al cabo otro mano a mano que le ganaba el Barça al Madrid, alineado detrás de Cristiano. Empezar el año encabezando el campeonato era un consuelo. Y la de ayer era buena oportunidad.

O no tan buena. El Reyno de Navarra se lo pone siempre difícil al Madrid, con ese Osasuna aplicado y duro, ese público entregado, ese campo cerrado y en ocasiones, como la de ayer, mojado. El Madrid hizo un esfuerzo, pero no estableció la diferencia necesaria para asegurarse una victoria. En el primer tiempo fue más Osasuna, con su juego algo primario, pero entusiasta. En la segunda anduvo mejor el Madrid, pero todo lo que sacó de eso fueron dos ocasiones claras de Higuaín, que se le escaparon. La primera, porque pifió y soltó un tiro picudo. La segunda, por una gran parada de Ricardo.

Poca cosa para tanto Madrid. Quizá es que Cristiano no puso su plus. No es que jugara mal, pero fue un jugador más, no estableció diferencias, y este Madrid lo único que tiene de verdad diferente, mientras vuelva Kaká o Benzema se centre del todo (que está en ello) es Cristiano. Van der Vaart perdió el estado de gracia que le había acompañado en los últimos partidos (quizá le achicharró el ritmo de una noche tan brava como esta) y el Madrid se quedó en la conocida seguridad de su defensa y en el impulso de todos. No salió líder. No lo mereció mucho tampoco. Habrá otras oportunidades, pero esta pasó.