El Villarato no se corta un pelo...

El Villarato no se corta un pelo...

En Navidad hablé con un peñista del Norte de la península y me dejó helado: "Tomás, somos amigos íntimos de un árbitro internacional que hace años machacó al Madrid en una eliminatoria de la Copa del Rey. Tomando un café y hablando sin tapujos, nos confesó que él es del Madrid desde niño, pero que ha crecido en la organización hasta lo más alto porque Sánchez Arminio es implacable ante los errores a favor del Madrid o a favor del Barça. Si es lo primero, palo. Si es lo segundo, zanahoria". Una prueba más de lo que significa el Villarato. Claro que no hay consignas directas. Simplemente, existe una autocensura cerrada y fanática. Casi peor...

Si usted se apellida Rodríguez Santiago y da por bueno un gol de Messi con la mano al Espanyol estando la Liga en juego, sabes que a los dos días te darán como premio la final de Copa: Sevilla-Getafe. Si usted se llama Iturralde y es un rebelde, se le lleva al lado más oscuro del Sanchezarminiato para que interprete como penalti un simple 'desmayo' de Xavi dentro del área. Y el descaro más atroz llega ahora con González Vázquez. Más conocido como Bernardino El Culé. Le llaman así sus amigos y cualquiera que le conoce desde niño, cuando se paseaba por su tierra gallega con su camiseta del Barça. Además, tiene el 'honorable' récord de tarjetas en un Athletic-Racing: 17 amarillas y 5 rojas.

Sigamos sus últimos movimientos. El pasado sábado esquilmó al Villarreal al hurtarle dos penaltis de libro (agarrón escandaloso de Alves a Marcano y derribo de Puyol a Nilmar) y perdonó dos rojas: a Puyol y a Ibra. El Villarato se vino arriba y como premio le han dado el Athletic-Madrid del próximo sábado. Y Bernardino, tan feliz. Ya sabe lo que eso significa. "Has machacado al rival del Barça y ahí tienes tu caramelo". Pobre Real. ¡Lo que le espera! El día que se confiese ese árbitro madridista del Norte...