Los desafíos del fútbol argentino para 2012

Los desafíos del fútbol argentino para 2012

Selección. Después de años y años en que los entrenadores duraron lo que dura un hielo al sol, Alejandro Sabella tiene la obligación de enderezar la nave rumbo a Brasil 2014. Darle el brazalete de capitán a Messi fue un absoluto acto de justicia: en un plantel sin caciques, el mejor del mundo empieza a conquistar a un público que increíblemente siempre lo miró de reojo.

Boca. Reciente campeón y con goce permanente por las desgracias de River, vuelve a un lugar que le es familiar y ameno. El regreso a la Copa Libertadores lo pone como candidato por mandato histórico. Como siempre, dependerá mucho del estado físico de Juan Román Riquelme. Sus hinchas, igual, ya sueñan con el Mundial de Clubes.

River. Los 110 años de gloriosa historia ya fueron manchados por el descenso y ahora empieza la preparación para los últimos 20 partidos (todos indescifrables) que lo deberían llevar a Primera. Tendrá un ataque insólito para una Segunda División: el Chori Domínguez, Cavenaghi y Trezeguet. Antes, habrá dos Superclásicos de verano a puro morbo.

El resto. San Lorenzo deberá evitar lo que le pasó a River (descender a la Nacional B), Racing tendrá que adaptarse a un cambio rotundo de estilo de juego (Basile sustituyó a Simeone), Independiente tendrá que levantar de una buena vez... Y todos van a convivir con las urgencias de un fútbol en el que esas urgencias son leyes absolutas.