La afición, orgullosa de su club

La afición, orgullosa de su club

La afición del Atlético asistía hace unos años, no sin cierta envidia, a los éxitos de los clubes españoles en las competiciones europeas. Mientras el club madrileño salía del infierno e intentaba componer plantillas de acuerdo con su categoría, otros se ponían de moda en Europa. Al cabo de unos años, el Atlético no es que esté de moda, sino que ha vuelto al que solía ser su lugar a lo largo de su historia. Una generación entera de seguidores rojiblancos ha estado huérfana de éxitos y se ha tenido que conformar con lo que le contaban sus padres, familiares y amigos. Esto se acabó.

Incluso el presidente del Sevilla, Del Nido, rival rojiblanco en esa lucha por el podio en el fútbol español, admitía ayer que el Atlético es el tercer club de nuestro país tanto a nivel de títulos como de masa social. El Atlético vuelve a ser grande en el terreno de juego aunque nunca dejó de serlo en la grada. Ahora que el club es Supercampeón de Europa me acuerdo de las matinales en Segunda con el Calderón a rebosar. Y a una hinchada dando aires a una institución que vivía sus peores momentos. Pero eso es pasado. La afición está orgullosa de ese escudo y de su himno. Y también de que el club vuelva a ser uno de los más grandes de Europa.