El Bernabéu acabará sorprendido

El Bernabéu acabará sorprendido

La teoría indica que el Real Madrid no tendrá ningún problema para solventar su próximo compromiso. El Celta es un recién ascendido, lleno de jugadores desconocidos aún en el panorama nacional y, a priori, lo lógico es que las dudas sólo oscilen sobre el número de goles que los blancos le endosen a los celestes. Permítanme dudarlo. Primero, porque en el vestuario vigués hay una fe absoluta en sus posibilidades y están convencidos de que son capaces de dar la campanada. Ni mucho menos lo dicen con la boca pequeña. Y segundo, porque este grupo plagado de jóvenes no está exento de calidad.

Este nuevo equipo es un remake casero del EuroCelta, aquel que maravillaba con su fútbol a las órdenes de Víctor Fernández. Y mañana seguro que más de un jugador encandilará al público blanco. Los madridistas alucinarán con el desparpajo de Iago Aspas, líder indiscutible del Celta más gallego de los últimos tiempos. Pepe, Ramos y compañía no deberían fiarse del moañés porque al mínimo descuido les dejará en evidencia. Cristiano tendrá que vérselas con el nuevo Míchel Salgado, Hugo Mallo, y Di María sudará para doblegar a Roberto Lago. Los cerebros de la trama serán Oubiña y Álex, un doble pivote muy elegante. La nueva generación de A Madroa va a sorprender.