En auge y sin la soga al cuello

En auge y sin la soga al cuello

El Real Zaragoza acude al Santiago Bernabéu en su mejor momento de la temporada, después de empalmar tres victorias entre la Liga y la Copa del Rey y sin algo más que urgencias por primera vez en muchísimo tiempo. Manolo Jiménez descubrió su mejor once en Granada y desde entonces el equipo viene creciendo en resultados y en fútbol. El coliseo blanco es terreno prohibido para la inmensa mayoría de los mortales, pero el Zaragoza parece en condiciones de plantear al menos un partido de dificultad para el Real Madrid. Hélder Postiga, su referencia en ataque, está con la baba del gol, Víctor Rodríguez y Montañés, novatos en estas grandes batallas, siguen creciendo en desparpajo y atrevimiento, Apoño se está acercando a su mejor versión, también en la pelea y la brega, Zuculini corre por cincuenta y la defensa, con Loovens incrustado en el centro y Abraham en fase de expansión, va cerrando grietas. Roberto, al que esta noche le aguarda trabajo extraordinario, ya no tiene que hacer cada cinco minutos la parada de su vida, y Sapunaru, al que espera el desafío mayúsculo de Cristiano se ha elevado hasta ser el mejor de los fichajes.

El Zaragoza es aún y lo será por bastante tiempo, un equipo en construcción, justo de calidad en muchas posiciones y obligado al sobreesfuerzo pero Jiménez sabe lo que tieney va n uen camino. Hay que darle tiempo ara que vaya ajustando l equipo y regrese al cauce del que fue desviado por la incompetencia, el mal gusto y los intereses particulares de Agapito Iglesias.