Se busca el tercer rey mago

Se busca el tercer rey mago

El día de los Reyes Magos es idóneo, quizá el más apropiado en 365 días que tiene el año, para que el Espanyol rescate una soberbia alegría del Camp Nou. Y no por el tópico de los regalos, ni siquiera porque llegan los pericos con mayor preparación a sus espaldas -regresaron de vacaciones cuatro días antes que el Barça-, sino porque lo que necesita el Espanyol es precisamente magia. En su sentido más literal. Sólo un hechizo futbolístico elaborado por Aguirre, un acto contrario a las leyes naturales, puede obrar un empate o victoria ante el Barça acaso más efectivo de la historia.

Pero incluso un entramado táctico que desactive el juego asociativo de los azulgrana requerirá de unos magos que ejecuten el sortilegio del gol. El más preciado. El Espanyol ya tuvo estrellas que marcan el camino en el Tamudazo (2007) y el Delapeñazo (2009). Fueron dos Reyes Magos capaces de brindar a los pericos más algarabía que la de un niño desenvolviendo regalos y a los culés, más ira que al recibir carbón. Se busca, tras Tamudo y De la Peña, el tercer rey mago. Candidatos, llamen a la puerta de Víctor Valdés.