Tercera experiencia con horario matinal en el Bernabéu. Me encanta. De hecho, el santuario registrará hoy en el derbi con el Getafe una de sus mejores entradas en esta tortuosa y convulsa temporada. Jugar a las 12 es perfecto para promocionar el fútbol familiar. Llevar a tus niños al campo a esa hora te garantiza fidelización futura a este producto maravilloso al que cada vez cuesta más buscar clientela nueva por culpa de la amplia oferta de la industria del ocio y de los precios desorbitados. El Madrid ha reaccionado bien con este último asunto, bajando las entradas más baratas hasta los 15 euros. Así, sí.
Jugar a las 12 les favorece también a los jugadores. Se evitan la ansiedad de la tediosa concentración del hotel esperando la habitual hora nocturna del partido y luego pueden hacer planes para irse a comer con la novia o los colegas y pasar la tarde en el cine. Como cualquier ciudadano normal. De hecho, a los hombres de Mourinho les ha ido bien con este horario que permite cambiar la cerveza y el bocata por el chocolate y el café con churros. Cristiano y Benzema fueron los más activos en esas dos exhibiciones diurnas ante Osasuna y Sevilla: 4 goles cada uno. Higuaín y Pepe completaron esa brillante decena en la before hour. Por cierto, para los periódicos también es una hora estupenda. No veo contraindicaciones. A quién madruga, Dios le ayuda.