Cambio de ciclo por parte del Atlético. A ver ahora quién le discute que es la alternativa de poder a los dos galácticos. Los colchoneros van a disputar su sexta final en los últimos tres años. Con un balance de cuatro títulos a la espera de lo que suceda en la final con el Real Madrid. Mejor, imposible. Es como para sacar pecho y, desde luego, Simeone tiene un don especial para aumentar el rendimiento de su gente. Ayer nuevamente Miranda volvió a demostrar que es un central de lujo. Paró, mandó y templó a un Negredo que es uno de los delanteros con más peligro en España. Y encima nunca rifó la pelota. Siempre intentó sacarla con criterio y esto es algo que se tiene que valorar de manera admirable por parte del técnico colchonero.

El balance del Cholo en las finales, incontestable. Dos de dos. Y ahora quiere devolver al Calderón un título que se le resiste desde hace 17 años. La euforia colchonera está desatada y ahora lo que se quiere es que el Calderón sea el escenario elegido por la Federación. Tal y como ha dicho el presidente nos corresponde si se mantiene el pacto del alternancia establecido entre los vecinos madrileños. Este Atlético está lanzado y no renuncia a nada. Y la Champions, casi atada.