Klopp contra la Inquisición

Klopp contra la Inquisición

Como para tantas otras cosas, en este país nos faltan todavía unos años para comprender a personajes del fútbol como Jürgen Klopp. Quizá nos tomamos todo demasiado en serio, tal vez sea cosa del atraso secular, o de la Inquisición y los Borbones, o de vaya usted a saber. Pero tanto buen rollo nos escama. En España los entrenadores rara vez sonríen. Y mucho menos se carcajean. Si lo hacen es porque algo va mal o está a punto de ir a peor.

Aquí prima el sarcasmo (la ironía escasea), la mala leche y la inseguridad revestida de carácter en los banquillos. Por eso desconfiamos de un tipo que busca su lado bueno en cada gesto mientras luce su condición (incontestable) de ganador con el aire mediático del fútbol caviar a favor. La culpa será siempre nuestra. No importa que este año haya fracasado ante el Bayern en la Bundesliga ni que se echase atrás para jugar a la contra en el Bernabéu, tampoco que resultase estomagante su rueda de prensa tras eliminar al Málaga. Los Borbones, la Inquisición, el atraso secular todo eso nos confunde, ¿no? ¿O acaso no vamos tan desencaminados?

Comentarios

Comentarios no disponibles