La noche feliz de Casillas y Cristiano

La noche feliz de Casillas y Cristiano

Ganó el Madrid al Chelsea en noche feliz de Cristiano Ronaldo y Casillas, el primero con sus dos golazos, el segundo con dos buenas paradas. Nada raro en lo de Cristiano, es un fenómeno de época; en cuanto a Casillas, lo que estaba necesitando era esto, actividad, seguridad, una noche convincente en la que enterrar sus temores. Por momentos llegué a temer que el golpe que le dio Mourinho le pudiera quitar el sitio. En esta final de Miami le volví a ver bien, firme, de nuevo en sus casillas, si me permiten el retruécano malo y facilongo. Mourinho, por cierto, no se quedó a verle levantar la Copa.

Mourinho, como era de esperar, aprovechó la ocasión para quedar mal, que es lo suyo. Desde las declaraciones previas al partido a las posteriores (“Es una película del Madrid, que viene de la ciudad del cine”) pasando por el gesto de ponerse de espaldas a los fotógrafos y por ese escabullirse cuando el rival iba a alzar la copa. Un mal hábito que ya cultivaba en el Madrid, una razón más para celebrar que ya no esté. Cuanto más tarde en cruzarse otra vez, mejor. No porque el Chelsea sea un rival deportivo de talla, que lo es, sino porque Mourinho despierta lo peor del madridismo. Y por eso, cuanto más lejos más tranquilos.

Pero pasó el trago y lo que queda es que al Madrid se le ve bien y a Ancelotti, con las ideas claras. Ayer repitió equipo de salida, lo que confirma que ya tiene sus decisiones tomadas. Cuando vuelvan Varane y Xabi Alonso nada cambiará. El estilo de juego está definido, hay una atmósfera de consenso y los resultados contribuyen a la calma. Casillas ha vuelto, Ancelotti le ha dado confianza de titular, Mourinho se vuelve a perder por el horizonte, Cristiano luce su terrible capacidad para el gol. Llegará (supongo) Bale y hará un impacto, pero ahora mismo todo es plácido. Ganarle al Chelsea de Mou ha sido muy bueno.