El Relámpago, tranquilo y seguro

El Relámpago, tranquilo y seguro

Desde 2008 la expectación por ver enfrentamientos entre los atletas más rápidos de la historia ha sido máxima. Se han visto carreras inolvidables, pero al final el gran vencedor (salvo por el accidente de la salida en Daegu 2011), ha sido Usain Bolt. Ahora dicen que, ausentes en este Mundial Gay, Blake y Powell, la motivación de Bolt será menor y su victoria, tan segura como poco emocionante. Lo primero no lo creo. Bolt es como Messi o Cristiano: su ambición no tiene límites. No se confiará. Opta a igualar las 10 medallas de Carl Lewis y los 8 oros del citado Lewis y Michael Johnson. Es decir, seguir agrandando su leyenda. Maurice Greene afirma que Gatlin puede derrotar a Bolt en los 100. No es improbable pero sí muy difícil. Las series clasificatorias no han dado ninguna sorpresa. Los 9.98 de Rodgers y 9.99 de Gatlin anticipan que en la final puede haber otra vez cinco o seis atletas por debajo de diez segundos.

Pero Usain Bolt, a pesar de hacer 10.07, dio muy buenas sensaciones. Vuelve a optar por ampliar más la zancada en las series (hizo 40,5) y probablemente realizará 40 en las semifinales, para luego recortar un poco la amplitud (tal vez haga 41 zancadas) y aumentar drásticamente la frecuencia. Es lo que ha hecho siempre en los últimos años. La clave de las finales de Bolt no es ampliar la zancada, sino dar más pasos por segundo. Y eso lo consigue gracias a reducir su tiempo de contacto en el suelo, que en muchos apoyos está por debajo de los 100 milisegundos.

Comentarios

Comentarios no disponibles