Dice Ancelotti en RNE que irá a la guerra para que Casillas se quede en el Real Madrid. En realidad, sería mucho más fácil evitar el fusil y apuntar en su pizarra el nombre de Casillas en las alineaciones. Iker ha dicho que no tiene pensado abandonar el Real Madrid y también que necesita jugar, primero en su equipo y de esa forma luchar por seguir en la Selección. Hace un mes Casillas echaba cuentas sobre el número de partidos que jugaría durante la temporada y valoraba que gracias a la Copa del Rey llegaría a febrero con catorce encuentros en el mejor de los casos.

Ancelotti quiere a Casillas en su plantilla, pero no como titular indiscutible. En esas condiciones se verá obligado a batallar para mantenerle dentro del Madrid. No está hecho Casillas para ser segundo portero en un equipo donde ha ganado a lo largo de su carrera catorce títulos. Ancelotti ha dejado claro el papel que quiere para Iker, es el mismo que le da a Diego López. Una elección que está en su perfecto derecho como entrenador, el mismo que tiene Iker Casillas a decidir su futuro y evitar guerras baldías, como en realidad lo son todas.