Una luz de esperanza en la niebla

Con el Levante hicimos quince puntos en la primera vuelta y nos salvamos”, recordó Luis García a un Rayo, que recuperó la senda de la victoria (su último triunfo databa del 9 de noviembre, 0-2 al Celta) ante una víctima propicia, ávido de encontrar al fin su punto de inflexión. Aquel Levante acabó la temporada 2010-11 con 45 puntos y la permanencia asegurada. Ese es el ejemplo a seguir y el juego desplegado en el derbi es el camino. Paco incidió en la importancia del próximo partido liguero en Elche, un rival directo por perpetuarse en Primera y el primer escollo franjirrojo para demostrar que los dos partidos consecutivos sin encajar (Levante en Copa y Getafe) y los últimos tres puntos cosechados no son un mero espejismo.

Saúl volvió al eje de la zaga y Baena a la labor de contención en el mediocampo para dar una mayor libertad a Trashorras. Ese equilibrio atrás encontró el aliado perfecto en las botas de Bueno, que es el pichichi vallecano con seis goles. Ayer se atisbó una luz de esperanza entre la espesa niebla, a la espera de refuerzos en invierno. Con la secretaría técnica rastreando el mercado en busca de un delantero, un jugador de banda y un central, el técnico argumenta que jugando como en el Coliseum, alcanzar la permanencia ‘sí se puede’, como cantó la afición. Siempre fiel a su Rayo.