P. P. San Martín

Algo más que magia y goles

Isco suma ocho goles en lo que va de temporada, de ellos seis en Liga y dos en Champions. No es una cifra menor, considerando su intermitente aparición en el campo. Isco tiene mucho que aportar al Madrid, siempre que el dibujo se lo permita. La mala noticia para el flamante fichaje es que Ancelotti no le encuentra sitio. O el jugador se adapta o lo va a tener muy crudo para aspirar a la titularidad. El técnico le pone a prueba en dos posiciones que no le van: o de falso nueve o por la izquierda en la línea medular. Ninguna a la medida de Isco.

Para robar balones, pelearlos y sufrirlos, Isco no está hecho. No podrá imitar nunca a Di María. Tampoco se le ve con sitio cuando es ‘falso nueve’, pues baja bien a enganchar pero flojea en la reacción para llegar al área durante noventa minutos. A Isco le gusta merodear por el enganche, recibir el balón, darlo y meterse en el área. Crear, en una palabra. Hoy tendrá una nueva oportunidad ante el Villarreal para reivindicarse, pero siempre desde la disciplina táctica. Ancelotti lo tiene claro: el equilibrio es innegociable. El técnico le pide lucha, sacrificio, subir y bajar, tensión de principio a fin. Es decir, no sólo magia y goles.