16 equipos hacia Lisboa. Había expectación tras casi dos meses de ausencia. Cómo llegan y cómo rendirán de nuevo en competición continental los 16 equipos. La apuesta española sigue firme con tres. Bienvenida Champions League.

Orgullo rojiblanco. Raúl García ha renovado hasta 2018. Saúl hasta 2019. Política de renovación de un proyecto que marcha a la altura de los mejores de la Liga y de Europa. En Champions: 15 goles a favor, tres en contra. La intensidad con la que salió al campo el fin de semana será clave en San Siro, dado que el Milán no está fino, pero menos en los primeros tiempos. Diego Costa suma cuatro goles, una asistencia y 13 remates en 196 minutos. Datos más que suficientes para creer.

Buscando al Milán. Encontrar la estabilidad es fundamental antes de marcarse otros objetivos. Llegó Seedorf con una propuesta ofensiva y se ha encontrado resultados insuficientes en la Serie A (tres victorias, tres derrotas y un empate). Las victorias se las deben a un Balotelli que un día llora y otro marca. No ha repetido alineación, sigue buscando al equipo. Pero cautela, el respeto a un excampeón, el menos favorito de los italianos al comenzar la competición y el único que sigue en octavos. Muy del Milán.

Parar a ‘Balo’. Siempre el mismo, es cierto. Cuando se buscan protagonistas en el Milán no hay otro que Balotelli. Con quien el Atlético de Madrid debe tener cuidado. Marcó de penalti en el debut en Serie A de Seedorf y dio los tres puntos ante el Helas. Inició la remontada ante el Cagliari en el 87 que completó Pazzini. Y volvió a marcar un golazo el pasado fin de semana al Bolonia. Tres victorias por la mínima, tres derrotas y un empate. Lleva tres goles y una asistencia en Champions.

Paciencia. Favorito el Bayern y el Arsenal a esperar. Los de Guardiola pueden jugar con Mandzukic como nueve o sin él. Con llegada por las bandas en velocidad. Con Lahm a un gran nivel como pivote, el uno en ese 4-1-4-1 que suelen utilizar. Tantas opciones que Cazorla y Arteta suman importancia para tratar de aguantar el balón. Frenar al rival y esperar los espacios para crear problemas, como ya lo hiciese en esta misma ronda, hace justo un año. Y si algo tienen los del norte de Londres es paciencia. La prueba: ocho años sin títulos, con el mismo entrenador y de nuevo en renovación.