Con Costa arranca el debate del 9

Acabó el derbi en el Calderón, Diego Costa se dirigió al árbitro Delgado Ferreiro con gesto muy serio y enfadado, pero cambió cuando vio justo detrás del árbitro a Sergio Ramos. Chocaron sus manos y se dieron un abrazo. Atrás había quedado una batalla cargada de quejas. Ambos sabían que a partir de entonces comenzaban una semana muy especial, juntos en la Selección, que es capaz de hacer compañeros a adversarios irredentos. El gran atractivo del partido de mañana empezó en la lista de Del Bosque por ser la última antes de la definitiva para el Mundial, y se agotará mañana con la presencia de Diego Costa en el equipo, incluso de titular tal y como se pudo ver en el primer entrenamiento. Después de tantas vueltas, Costa va a debutar en su estadio, con la camiseta que se enfundó nada más llegar a la concentración, la de España.

El caso Diego Costa ha puesto en alerta a los dirigentes brasileños tal y como nos cuenta Maroto. Tienen tantos jugadores que no los aprovechan cuando pueden, y cuando no pueden les entra la morriña por sus posibles internacionales. Costa ya estuvo concentrado con Scolari, que ni siquiera le dirigió la palabra. Después el seleccionador brasileño se hizo el ofendido, y de poco le sirvió. Diego Costa le pondrá picante al primer amistoso del año. Como su juego, con él se acelera el asunto del nueve de España, que tiene una incorporación nueva, algunos en la lista y otros mirando desde la distancia. Turno para Costa.