Su cuerpo responde así ante el estrés

Los vómitos presentados por Messi se encuandran dentro de lo que los médicos llamamos manifestaciones psicosomáticas como respuestas del organismo a una situación de preocupación o estrés emocional. Desde el punto de vista fisiológico, existe una gran conexión entre el cerebro y el tubo digestivo, de tal manera que ante situaciones de preocupación personal los receptores neurofisiológicos del cerebro envían un mensaje al aparato digestivo y éste reacciona con sintomatología neurovegetativa muy variada, unas veces en forma de arcadas y nauseas, otras veces en forma de vómitos e incluso diarreas emocionales. Cuando existe una base patológica, por pequeña que ésta sea, como un colon irritable o similar, entonces estos síntomas se hacen más patentes y frecuentes. Pero no siempre el organismo reacciona de la misma manera ante preocupaciones personales o estrés, ya que estas manifestaciones psicosomáticas le pueden afectar también a otras partes del organismo provocando síntomas diversos, como cefaleas emocionales, frecuentes en deportistas.

En el caso de Messi, considero que, si no existe un trastorno de base en su anatomía gastrointestinal, todo el cortejo sintomático neurovegetativo que presenta ocasionalmente en un partido o entrenamiento se debe única y exclusivamente a respuestas emocionales al estrés y a la ansiedad más que a una patología de su aparato digestivo. Nuestra experiencia en el fútbol, en este apartado, nos dice que la mayoría de las veces que hemos tenido un caso de estas características, hay detrás un pequeño fondo de preocupación y ansiedad, ajeno totalmente a un proceso patológico, metabólico u orgánico.