Volvió a ser un factor determinante. Raúl García entró en la historia de la Champions atlética igualando a Luis Aragonés y marcando el gol de la tranquilidad. Sigue peleando, no sólo por seguir siendo indiscutible para Simeone, sino también para estar en la convocatoria de La Roja para el Mundial de Brasil. Es, junto con Cesc, el mejor falso nueve que tenemos en la actualidad y gana al azulgrana en cuanto a eficacia de cara a la portería rival. Además es ya un icono colchonero.

Al final vio como el Calderón se ponía en pie y le aclamaba. De la mano de Simeone se ha convertido en una pieza maestra de su dispositivo táctico. Encima la suerte sigue de aliada colchonera en esta competición. Con el de ayer ya van siete tiros a los palos de la portería de Courtois. El fantasma del pupas ha desaparecido. Este año no es extraño que el Atlético sea el coco en el bombo de cuartos y que los aficionados ya estén preparando el desembarco en la final.