Hay 40 medallas bajo sospecha

La detención de Pentinel por tráfico de sustancias dopantes pone de nuevo al atletismo, y más concretamente al español, en el punto de mira. Pentinel fue destacado atleta, doble medallista europeo en 2002. Dos medallas que cabe poner bajo sospecha, y otro asunto abierto del cual la Federación Española de Atletismo no quiere saber nada, por ser, dice, competencia de la Agencia Antidopaje. Lo de la Federación comienza a ser un escándalo. En materia de dopaje no se entera de los positivos, de los expedientes, de las detenciones, ni de las sospechas. Pues con las dos de Pentinel ya son nada menos que 40 las medallas ganadas por atletas de su generación o posteriores que no se han hecho precisamente merecedores de confianza.

Son Pentinel y Paquillo, detenidos por posesión de productos dopantes, son Sergio Sánchez, Alberto García, Raúl Fernández, Rey, Onyia, Bezabeh y Blanco, sancionados por positivos, y son Marta Domínguez y Nuria Fernández, implicadas en operaciones antidopaje. No es todo, pero sí lo aparecido en los últimos años y que afecta al medallero. Hay, por tanto, materia para preocuparse y, sobre todo, para investigar. De la Federación no lo esperemos, pero a Gómez Bastida, nuevo director de la Agencia, se le empieza a acumular el trabajo para que el deporte español tenga credibilidad. Esto sólo se consigue destapando el fraude que durante años hemos vendido como un éxito del atletismo, con Odriozola a la cabeza.