Sólo fallaron los frenos

2014. Hola amig@s! Empieza una nueva temporada en MotoGP y de nuevo estaré aquí con tod@s vosotr@s tras cada gran premio para contaros mis sensaciones y punto de vista del fin de semana. El invierno se me ha pasado rápido, quizá porque he parado menos que otros años por casa. He tenido viajes por patrocinadores y he entrenado mucho físicamente. La gente que me sigue por las redes sociales ya lo sabéis. Con la MotoGP no entrenamos mucho. Sólo hacemos tres de tres días en todo el invierno. Parece que no es mucho, pero es sorprendente como para nosotros los pilotos, después de tres meses sin montarnos en la moto, y con tan sólo unas diez o quince vueltas, somos capaces de coger de nuevo las referencias e ir igual de rápido que la última vez. Otra cosa es probar el material nuevo, ponerlo a punto… para eso, necesitaríamos más entrenamientos.

Cambio de horario. Aunque al final, al menos a mí, lo que nos motiva son los grandes premios. Esa tensión y adrenalina ya que debes dar todo lo que tienes en 45 minutos. Así que con esas ganas empezamos el Mundial, de nuevo en Qatar. Carrera rara por el horario y las condiciones nocturnas. En un GP normal, te levantas, vas al circuito, entrenas y por la tarde te relajas y trabajas con el equipo. Aquí te levantas, estás todo el día deseando subirte a la moto, va aumentando la tensión y el día se hace interminable. Luego, trabajas un poco con el equipo y llegas al hotel a las dos de la mañana… No me gusta este horario, por suerte sólo hay una carrera con estas condiciones.

Losail. Esta pista siempre me ha traído problemas con la moto. Habíamos probado hacía diez días y tuvimos que hacer grandes cambios para mejorar las sensaciones. Pero este año, por todo el trabajo de 2013 y la pretemporada, hemos sido competitivos desde el primer entreno. Siempre estuve delante, tenía ritmo y buenas sensaciones. Quizá no las mejores desde que llevo en la categoría, pero sí las mejores en esta pista. Estuve a nada de conseguir mi segunda pole en MotoGP, pero Marc me la quitó en su última vuelta. Aún así, estaba confiado para la carrera.

La carrera. Saliendo desde primera fila no pude conservar la posición y varios me superaron. No me puse nervioso porque sabía que tenía ritmo. Comencé a pasar pilotos y desde la octava plaza en la primera vuelta me puse segundo. Creía que podía marcar mi ritmo, pero tuve problemas con los frenos. Ya sabéis que uso unos distintos a los demás y durante la carrera me funcionaron irregularmente. A veces frenaban más, otra menos, otras la maneta estaba alejada, otra estaba más cerca… cada curva era como si usara frenos distintos. Tuve un par de sustos que pude salvar y perdí varias posiciones de nuevo. Me mantuve frío e intenté centrarme en las frenadas para salvar la situación. Al final vi que podía estar en el podio incluso con el problema, pero no podía frenar como quería y me costó pasar a Dani. Cuando lo hice, intenté mantener mi ritmo, porque Marc y Vale ya me sacaban un poco. Pero a falta de dos vueltas, en la segunda curva, apenas toqué el freno perdí la rueda delantera. Lástima porque hubiera sido un fin de semana perfecto.

Optimista. Me quedo con lo positivo, que es mucho. Fuimos competitivos en una pista donde nunca lo había sido, tuve buenas sensaciones en la carrera, quizás las mejores que he tenido desde que estoy con esta moto, y estuvimos luchando con los oficiales aún con un gran problema de frenos. Sólo puedo estar contento de cómo hemos trabajado, nos merecimos una recompensa que no llegó, pero esto sólo me da más fuerza para seguir intentándolo con más ganas, y ahora que me siento bien con mi moto, vamos a intentar mejorar lo que no funciona para ser aún más fuertes.

¡A por Texas! Próximo destino: Austin. Segunda vez que corremos allí. Al menos ya tenemos referencias del año pasado. Pista difícil y exigente. De momento yo he hecho una escala de un par de días en Dubai por tema de trabajo, pero también aprovecharé para descansar y cargar pilas. Espero que el siguiente gran premio podáis disfrutarlo y vivirlo tod@s en directo y ojalá pueda estar de nuevo entre los fuertes de la categoría. Hasta entonces, ¡que paséis felices días!