El Bernabéu, Reus, Ibra, Mourinho y las segundas partes

Reacción. Las dos derrotas ante Barcelona y Sevilla en Liga, y que le descolgaron del liderato, escocieron, cómo no, a la afición del Real Madrid. Reaccionaron con pitos a unos y otros y un ambiente frío el fin de semana. No cura la goleada ante el Rayo. El Bernabéu espera hoy la reacción, en noche europea y ante un rival de feo recuerdo, el Borussia Dortmund.

Oportuno Reus. Sin Lewandowski (sancionado) y Götze (ahora en el Bayern) la única amenaza de ese tridente que acabó con el Real Madrid la temporada pasada es Marco Reus. A los 24 años ha pasado de animar en la grada con 10, descarte de la cantera con 18, a rectificación y fichaje de 17 millones. Tan irregular como el Dortmund esta temporada ha elegido este momento para resurgir y llamar la atención. Vuelve al Bernabéu tras hattrick y remontada.

"El otro". El futbolista más rápido del mundo es Pierre- Emerike Aubameyang. Batió en 30 metros por tres centésimas la marca de Usain Bolt (con el ventajismo de obviar los 70 metros restantes y sabiendo que la salida no es el fuerte del jamaicano). Aun así, el de Gabón es veloz y un peligro para la defensa del Madrid, que estará advertida porque Ancelotti le conoce de la liga francesa, del Saint Etienne. Hoy, que se ha rapado en su cabeza BVB y cinco estrellas, sin Lewandowski, "el otro" cobra protagonismo.

Favorito no. "El fútbol —según Blanc—, no es una ciencia exacta, pero el objetivo para todos es ganar la Liga de Campeones". Entonces, ¿por qué se pasan la pelota del favoritismo de Chelsea a París Saint Germain y nadie la quiere? Mourinho por plantilla y falta de gol, Ibra por falta de experiencia y éxito europeo de su club. ¿Cuestión de presión o de guardar excusas ante la derrota?

Motivación. A Ibrahimovic le mueve la motivación de ganar la Champions, esa que le ha ido esquivando equipo tras equipo en la competición. Y se acerca a sus últimas oportunidades con el PSG, un equipo con opciones reales a llevársela. Los franceses suman 28 partidos invictos en el Parque de los Príncipes, de menos de 50 a un 60 por ciento medio de posesión, es un equipo visiblemente más fuerte. Y el sueco, que suma 10 goles en los 7 partidos en la competición continental, su auténtica fuente de inspiración.