La mejor designación posible era Howard Webb

El nombramiento de Howard Webb es la guinda que faltaba para ver este gran partido. El inglés es un árbitro veterano que en junio cumplirá 43 años y que es considerado uno de los mejores del mundo. Personalmente para mí es una debilidad verle arbitrar ya que se amolda a cualquier estilo de juego, pero sin perder su personalidad. Una personalidad que es muy marcada y siempre sin dejar su estilo inglés de arbitraje, ya que deja jugar al límite y con contacto y aplica bastante la ventaja, como es su costumbre si el desarrollo del juego se lo permite.

Sólo hay que tener cuidado con Webb en un aspecto: deja bastante contacto, pero no permite la mala intención o los malos modales, ya que si una cosa buena tiene Howard es que ningún partido que yo recuerde se le ha ido de las manos. Antes deja su buen estilo de arbitraje para dar un concierto de silbatos y tarjetas. Y en este Atlético-Barcelona sabemos que puede pasar de todo.

Seguro. Tener a Howard Webb de entrada es una garantía para un partido como este, en el que competirán jugadores especialmente aguerridos y con artimañas poco deportivas tal y como las que hemos visto en algunos partidos de Liga, por ejemplo los casos de Godín y Busquets. Lo que tienen que hacer ahora esos jugadores es dejar todo eso en la caseta, ya que en Champions las tonterías que se hacen se pagan muy caras. Además, el colegiado sabe cómo es cada uno de los jugadores contendientes, ya que es nuestra obligación estudiarlos previamente a todos ellos. Seguro que Webb dará una lección de arbitraje. Espero no equivocarme.