La verdad es que no he seguido muy de cerca las noticias sobre lo que está ocurriendo estos días en Donetsk, pero sí sé más o menos lo que pasa allí. Aunque esa parte del este de Ucrania es de mayoría prorrusa, también hay gente que se siente ucraniana. Yo nací en Donetsk y he hablado siempre en ruso, que es mi lengua materna. Pero la ciudad es actualmente de Ucrania. No quiero entrar mucho en política, pero no sé por qué tiene que meterse ahí Rusia. ¿Por qué lo hace? Espero que las cosas se solucionen pacíficamente, sin que haya problemas militares. Allí tengo algunos familiares lejanos y algunos amigos, aunque no mantengo mucho contacto con ellos. Desde que llegué a España, con once años (primero viví en Barcelona y luego me desplacé a Madrid para entrenarme en el CAR y residir en la Blume), sólo he vuelto a Donetsk dos veces. Todo estaba muy cambiado.

Tengo buenos recuerdos de la ciudad, porque crecí en ella. Es industrial, con poco turismo. La reunión internacional de Donetsk es impresionante. Se ha batido un montón de récords del mundo. Es un lugar especial para hacer pértiga. Yo no he competido nunca allí. Me gustaría hacerlo alguna vez, quizá el año próximo, aunque tal y como están ahora las cosas, vete a saber qué pasará. Aunque Donetsk sea la ciudad de la pértiga, yo comencé a saltar en Barcelona. Empecé haciendo todas las pruebas, pero la pértiga se me daba especialmente bien.

Bychkov, campeón español de pértiga, nació en Donetsk.