La curiosa historia de Oscar García al frente del Brighton

Pasado. Oscar García, al final de su carrera, casi se convirtió en jugador del Brighton. Fue una apuesta del presidente de entonces, Dick Knight, que el entrenador no vio con buenos ojos. Cuando Oscar pidió unos vídeos del equipo, por entonces en la League One, para ver si el estilo de juego le iba bien, el preparador lo utilizó como excusa para no ficharle: “Ningún jugador debería pedir eso”, le dijo al presidente. Ya como entrenador y tras pasar por el Juvenil del Barça que tuvo a Thiago, Cuenca y Bartra, y ganar la liga con el Maccabi Tel Aviv, el Brighton lo fichó para ser su entrenador. Oscar, que tuvo ofertas para entrenar en la cantera del City, dio el salto y se convirtió, tras Roberto Martínez, en el segundo técnico español en participar en la quinta liga más competitiva, con más seguidores y más rica de Europa. Y ha llevado a su equipo a los play offs de ascenso tras un gol del ex del Almería, Ulloa, en el minuto 94.

Estilo. Oscar se lo está pasando pipa. Vino con buen inglés, con conocimientos de la liga, pero la cosa no empezó del todo bien: tres derrotas seguidas y la sensación de que la liga era complicada, con la mayoría de equipos jugando al balonazo. Pero el ex de Barça y Espanyol persistió en su apuesta, después de que Gustavo Poyet ya hubiera puesto las semillas del estilo: más posesión de la habitual, juego de posición y el abandono del marcaje individual en el centro del campo. Sí, eso persiste en la Championship.

Meta. Los play offs no eran el objetivo de la temporada para un club singular. Tiene un presupuesto para acabar en la mitad de la clasificación pero un dueño, Tony Bloom, muy ambicioso, hombre de negocios de apuestas con una fórmula matemática secreta que le ha hecho millonario. Construyó un estadio, el Amex, que se estrenó hace tres años y este verano se abrirá las puertas de su nueva ciudad deportiva.

Futuro. Tras tocar fondo, el Brendan Rodgers de la Championship, como le denomina Bloom, consiguió que el equipo remontara pese a una larga lista de lesiones, a perder 6 jugadores en enero, y a tener que entrenar en las instalaciones de una Universidad. Ahora le toca superar el jueves y el domingo al Derby de McClaren que les ha derrotado en las dos ocasiones en las que se han medido. ¿Y si llegan a la Premier? No está claro que tengan la suficiente calidad, poderío e infraestructuras para permanecer en lo más alto. Y Oscar recibirá ofertas para cambiar de trabajo de equipos más establecidos.