Imperó la sensatez con Cristiano

En el calentamiento previo Cristiano no se encontró cómodo, no tuvo buenas sensaciones y decidió no jugar. Fue la decisión más sensata. En el transcurso del partido vimos que el Madrid no anda fino. El resultado fue engañoso. Demasiada aceleración y poca precisión en la finalización de las jugadas. El Madrid ha llegado al final de la temporada con las luces de reserva física encendidas. Pero eso no es obstáculo para ganar la Décima.

Las dudas vienen por el estado médico de algunos jugadores. ¿Se ha resentido Cristiano de su lesión del bíceps? Se están generando interrogantes al respecto. En cualquiera de las lesiones que se han dicho estos días, ha habido tiempo más que suficiente para una completa recuperación con vistas a la final sin necesidad de crear dudas e incertidumbres sobre la evolución de la dolencia. ¿Se está forzando al jugador más de lo razonable para su recuperación? El otro día oímos que Pepe está trabajando ocho horas diarias para intentar estar en la final. Si eso es cierto a mí se me rompen los esquemas de lo que “es” y cómo se recupera una lesión deportiva. Lo ocurrido ayer con Costa debe servirnos de lección. El organismo humano tiene sus propias reglas de cicatrización de las heridas y de la evolución de los procesos inflamatorios. Nosotros podemos ayudar a que sea mejor y más rápida. Pero no podemos ir contra la naturaleza.