Rizzoli falló en dos jugadas. Como casi siempre, el italiano hizo un partido serio y controlando bien el juego, aunque por lo que vimos los holandeses merecieron alguna tarjeta más, como en el minuto 14, dos entredas de De Jong y Sneijder, sobre todo la primera, mereció ver la tarjeta. Bien sacada en el minuto 24 a De Guzman, por una entrada muy fuerte y en el 25 viene la jugada más conflictiva de esta primera parte y que nos favoreció. Según mi criterio Diego Costa, como otras veces, entra en el área, hace el recorte, medio resbala ante la entrada del De Vrij, le pone el pie encima del defensor y arrastra la pierna cayendo. Muy listo Diego Costa, que consigue un penalti que para mí no lo es.

En el 42’, Martins Indi no hace penalti a Diego Costa ya que toca el balón antes de chocar. En el 54, Indi se deja caer cuando Costa con la mano le toca la cabeza y Rizzoli acertadamente le llama la atención por fingir al holandés. En el 65’, debió anular el tercer gol holandés, ya que Van Persie se despreocupa del balón y va a chocar intencionadamente con Casillas haciéndole falta en el salto y, además, dentro del área pequeña. En el 67’, acierta al anular el gol a Silva por fuera juego, y en el 77’, no hay penalti sobre Torres en el área holandesa. España es muy fácil de arbitrar, ya que durante todo el partido sólo hizo cinco faltas. Ninguna dura, mientras que los holandeses jugaron muy fuerte, cometiendo 17 faltas. Resumiendo, creo que el arbitraje en líneas generales de Rizzoli no ha sido malo, pero un árbitro con su categoría internacional no puede cometer esos errores en un partido tan importante como un España-Holanda en un Mundial.