José Luis Sáez fue el invitado de los Desayunos Deportivos de Europa Press, convertidos ya en un clásico de las mañanas madrileñas. Allí las gentes del deporte acuden a la conferencia del invitado de turno, y también a dejarse ver. Es un buen momento para charlar, estrechar o iniciar contactos, cerrar encuentros, conocer a los nuevos que llegan, etc. Igualmente sirve para medir el poder de convocatoria del protagonista, y en este aspecto cabe calificar al presidente de la Federación Española de Baloncesto como una persona de incuestionable notoriedad. Allí estaban cuatro ex secretarios de Estado para el Deporte, presidentes de otras Federaciones, organizadores de competiciones deportivas, patrocinadores, empresarios, etc.

Gentes del baloncesto, también. Por supuesto. Hasta la cúpula de la ACB en pleno, en un gesto de acercamiento, porque sabido es que las relaciones con la Federación nunca han sido buenas. Mas son otros tiempos y la gran virtud de Sáez es sumar. Por eso a su alrededor se reunieron mundos variopintos. Pero con algo en común: ganas de crecer. Como ha hecho Sáez. En diez años ha puesto su Federación a la cabeza en todos los aspectos. Incluso en el deportivo en un país de bajitos. Ahora nos trae el Mundial, sin crear problemas en tiempos de crisis. ¿Y eso cómo se hace? Pues para conocer la fórmula del éxito fueron tantas gentes ayer a verle. La fórmula tiene nombre: es el método Sáez. Consiste en trabajar hasta cuando no lo parece.