Dos meses y medio tiene España para purgar su mala cabeza en Brasil. Justo entonces comenzará la fase de clasificación para la Eurocopa de Francia 2016, será en el Ciudad de Valencia frente a Macedonia. En septiembre todas las dudas que ahora tenemos sobre la continuidad de Del Bosque –depende sólo de él-, y de algunos jugadores estarán despejadas, aunque la inquina de los que nunca pierden estará al acecho. No es probable que ni Macedonia, ni después Eslovaquia, Luxemburgo, Bielorrusia, y Ucrania vayan a plantear muchos problemas, sucede que ahora la duda está de nuestro lado, aunque la despedida ante Australia nos deparó destellos de lo que fuimos. Además, en Francia se amplía el cupo de participantes de una fase final a 24, con lo que se clasifican los dos primeros de cada grupo y el mejor tercero de forma directa, mientras que los otros ocho terceros jugarán una repesca.

Más allá de los rivales, la gran noticia llegará con la convocatoria para ese primer partido. Cierto que en las próximas semanas algunas dudas quedarán despejadas, pero será en la primera lista de la temporada cuando sepamos con qué España nos la jugamos. Lo suyo es que los que han estado en primera línea abanderen el cambio con los que están por llegar. Lo suyo es que algunos nombres ilustres y claves en la historia de nuestro fútbol ya no estén. Y lo suyo es que las cosas se hagan con mesura, determinación y respeto. Es decir, todo eso que es noticia en fútbol.