El Irreal Betis hace 'crack'

En la temporada 2005-06, el Real Betis Balompié, campeón de Copa, con Manuel Ruiz de Lopera en el palco y Lorenzo Serra Ferrer al frente del equipo, competía en la Champions League con el Liverpool y el Chelsea: al que ganó. En la 2014-15, ni diez años han pasado, y tras un descenso bochornoso, el todavía Real Betis Balompié afronta una campaña en Segunda o Liga Adelante, una más de tantas... pero sin fichajes, sin bajas... ni director deportivo. Cualquiera que use los nombres de Lopera o Serra Ferrer, a favor o en contra, se verá envuelto en un tiroteo cruzado, donde lo menos que le pueden decir es que cobra de uno o es un asalariado del otro: entre otras lindezas.

Pero, más allá, y cuando Lopera sigue siendo el máximo accionista a través de su empresa Farusa (51,34% de los títulos, algo que nadie ha podido evitar hasta ahora)... y Serra Ferrer se ha postulado hasta el infinito como director deportivo, siempre como arma arrojadiza en manos de la facción 'antiLopera' (¿cuáles son los méritos deportivos de Serra desde que dejó el Betis?)... la entidad verdiblanca se encuentra en un estado catatónico. Como club deportivo de alta competición, el Betis, judicializado y atomizado hasta el infinito, hace 'crack' o implosión a babor y estribor. La Fiscalía está harta de formular la misma petición que los abogados de Lopera: que se devuelva a su legítimo propietario el control efectivo del 51,34% de las acciones. Lo de 'legítimo' lo apuntaló sobradamente la Sección Primera de la Audiencia de Sevilla en auto del 26-2-2010, ante la enésima pesquisa de la jueza Mercedes Carmen Alaya Rodríguez: flamante portada a todo color de 'Vanity Fair' en fotos claramente de posado. Para y en aquel auto de 2010, la Audiencia se tomó la molestia de señalar que 'no cabe apelación'. Algo que, por supuesto, da exactamente igual a los grupitos que van llevando al Betis de juzgado en juzgado: ahora se combate en lo Mercantil (juicio fijado para marzo de...2015) por menos de un tercio de las acciones de Lopera, que aunque perdiera este caso, seguiría teniendo mayoría. Un número de personajes que actúan en esta judicialización permanente tienen, de un modo u otro, vínculos con la plataforma llamada 'Liga de Juristas Béticos' (LJB), con gran afecto mutuo por la Fundación Heliópolis... la Audiencia espera que Alaya firme definitivamente su eterna instrucción para dar su opinión sobre las insólitas y excepcionales medidas cautelares contra Lopera: que se remontan a cuatro años atrás, julio de 2010, las mismas medidas contra las que clama la Fiscalía.

Además y adelante, la lista de combatientes se nutre de cualquiera que tenga una cuenta de Twitter, pertenezca a determinadas familias con patente de corso o entre en determinados foros. Salvando ciertas distancias bélicas y béticas, el escenario de guerra civil y disparate continuo es algo así como el actual Irak tras la caída de Sadam Hussein y la retirada de las tropas occidentales. Hace un par de meses y al consumarse el descenso, el actual presidente, Domínguez Platas (alias 'Maíto), claramente vinculado a la LJB, dijo de boquilla que estaba dispuesto a irse no bien rematara la programación de la temporada. Ni se ha programado temporada alguna (no se han resuelto las cartas de libertad, sólo se ha fichado a Molinero, más los cedidos que regresan, no hay director deportivo)... ni 'Maíto' Platas tiene la menor intención de marcharse. La próxima semana entrará julio. La Liga Adelante comenzará en otros 40 días. El Real Betis Balompié, más irreal que nunca, y en plena guerra de guerrillas, hace 'crack', hace implosión en una crisis absolutamente histórica. ¿Alguien puede detener la sangría? ¿Cómo? ¿Sería posible a estas alturas taponar esa hemorragia ante una cornada de tantas trayectorias...?