Un pastor evangelista pitará el partido

Las aguas bajan revueltas en Brasil por la lesión de Neymar después de la entrada del colombiano Zúñiga con la rodilla por delante, que le ha ocasionado abandonar el Mundial. La FIFA ha nombrado para dirigir la semifinal entre Brasil y Alemania al mexicano Marco Antonio Rodríguez Moreno, un árbitro curtido ya en mil batallas que nació en la Ciudad de México (10-12-73). Es pastor evangelista de una congregación cristiana. Es conocido por dos apodos el de Chiqui Marco, por su parecido con un personaje de una serie televisiva de los ochenta llamada Chiquilladas, y el de árbitro predicador.

Es internacional desde el año 2000. Este es su tercer Mundial. Hace cuatro años, en el campeonato de Sudáfrica, sacó adelante con corrección los dos partidos que pitó, uno de ellos fue el España-Chile (2-1).

Ahora en Brasil ya lleva dos encuentros dirigidos. El primero fue el Bélgica-Argelia (2-1) con una actuación aceptable y el segundo fue el Italia-Uruguay (0-1), con un buen arbitraje en donde se dio el famoso mordisco de Luis Suárez al italiano Chiellini que, por cierto, no lo pudo ver, como nadie, porque el juego discurría por otro lado.

En su currículum aparece que ha arbitrado la Copa Libertadores varias veces y la Liga de Campeones de la CONCACAF, además del Mundial de Clubes de 2012.

El mayor, y más grave, error de su carrera se produjo en la final del torneo Apertura mexicano de 2011, donde sacó dos tarjetas amarillas al mismo tiempo, lo que le pudo costar ser retirado de internacional, pero volvió a pitar en la jornada sexta del torneo de Apertura de 2012, así que estuvo casi un año en lo que aquí llamamos la nevera.

Rodríguez Moreno es un árbitro diplomático, muy dado al diálogo con los jugadores y destaca por llevar siempre un buen control del juego. Es muy dado a aplicar la ventaja pero, sin embargo, es un poco blando disciplinariamente y tiene poca decisión en las áreas, salvo que sean jugadas extremadamente claras.

Creo que después de esta Copa del Mundo, en la que ya ha adquirido un protagonismo creciente, este colegiado azteca será un firme candidato, si se mantiene con su actual trayectoria, para pitar la final del Mundial que se disputará en Rusia en 2018, ya que entonces estará en su cuarto campeonato, tendrá 44 años, y la FIFA es muy dada a valorar, y también premiar, la experiencia en grandes eventos como éste.