El Madrid se ha adelantado a todos con una rapidez en los despachos que recuerda a los buenos viejos tiempos de Santiago Bernabéu y Raimundo Saporta. Toni Kroos deslumbró anoche al mundo entero. En Mineirao lideró al Maracanazo a lo bestia que fulminó a Brasil como si fuese un equipo de prejubilados. El alemán es una mezcla de Stielike y de Schuster. Agresividad en la presión, eficiencia y calidad en la creación, y personalidad y pegada en la definición. Su recital lideró a una Alemania imperial que en la primera parte parecía un ejército entero tomando las calles de Belo Horizonte...

Kroos va a ser un fichaje idóneo para el perfil del Madrid. Su amplio despliegue y su encumbramiento en Brasil permiten a los madridistas presumir de coche nuevo. Alta fiabilidad alemana. Además, por un precio más propio de las rebajas de verano. Por 25 millones (13 menos de lo que costó Illarra, por ejemplo), Ancelotti va a contar la próxima temporada con un mediocampisten capaz de hacerle un doblete inmisericorde a la canarinha, al que añadió una asistencia en el córner que remató Müller a placer. Kroos dio el “sí, quiero” al Madrid antes del Mundial. Y acababa contrato con el Bayern en 2015. Golazo en los despachos. Éxito total. Un fichaje mundial...