La decisión del seleccionador portugués, Paulo Bento, de no convocar en esta ocasión a Cristiano Ronaldo me parece una actitud totalmente coherente y responsable. Durante la preparación del Mundial de Brasil, Cristiano participó en muy pocas ocasiones en los entrenamientos globales de la selección y en todo momento estuvo con un plan específico para él, por sus problemas médicos. Eso terminó acarreando un problema mayor, ya que su estado físico se resintió totalmente y el rendimiento del jugador en el Mundial no fue el esperado por la afición de su país. Ha descansado durante las vacaciones y a su regreso ha realizado un pretemporada al margen del grupo, con entrenamientos totalmente individualizados debido a sus constantes problemas médicos que no terminan de solucionarse.

Es de todos conocido que el jugador pese a su gran profesionalidad, que nadie se la niega sino todo lo contrario, se está encontrando con problemas médicos que no le permiten realizar los entrenamientos intensos a los que está acostumbrado y que le han llevado a ser el número uno. Ya he dicho en numerosas ocasiones que tanto Cristiano como Messi necesitan del físico para su rendimiento. Son morfotipos futbolísticos diferentes a Zidane o Schuster, que sin gran preparación física, podían tener un muy alto rendimiento deportivo, por sus características técnicas. Así pues, una vez más deseamos que Cristiano se recupere totalmente si quiere volver a ser número uno. Que no importa el tiempo, sino la total recuperación para poder afrontar una temporada con más de 60 partidos en sus piernas...